9.4.6. Consumo de grasas tipo TRANS
El consumo de ácidos grasos insaturados tipo TRANS, presentes fundamentalmente en margarinas y en la bollería industrial, puede tener importantes consecuencias negativas respecto al desarrollo de ateroesclerosis. Éstas parecen relacionarse con su mayor sensibilidad a la oxidación y con su elevada viscosidad asociada a un lento aclarado plasmático de las VLDL y de las LDL. Por otro lado, los ácidos grasos TRANS muestran una considerable tendencia a acumularse como parte integrante de los fosfolípidos de las membranas celulares alterando sus condiciones normales de fluidez, hecho que puede alterar el funcionamiento de los receptores específicos para las diversas lipoproteínas allí asentados.
En general, las propiedades cardiosaludables de los ácidos grasos insaturados, como el ácido oleico, quedan anuladas cuando se trata de variedades TRANS, tal es el caso del ácido TRANS-oleico presente en margarinas y en grasas vegetales total o parcialmente hidrogenadas junto con otros ácidos grasos TRANS como el TRANS-linoleico.
- Algo a tener en cuenta:
Cabe recordar, además, la mayor tendencia de los ácidos grasos TRANS a depositarse como grasa visceral, circunstancia que también contribuye a incrementar el riesgo vascular.
9.4.7. Consumo de nutrientes con propiedades antioxidantes
Cualquier elemento o circunstancia que retrase la oxidación de las liproproteínas (en concreto de los ésteres de colesterol que en ellas se transportan) se considera un factor preventivo frente al desarrollo de las EV. En este sentido hay que destacar el consumo de nutrientes antioxidantes como los betacarotenos, presentes en frutas y verduras, y especialmente, la vitamina E, presente en los frutos secos, en el aceite de oliva y en los pescados azules.
Un grupo de sustancias antioxidantes, cuyo papel en la prevención de la ateroesclerosis está siendo objeto de estudio, es el de las furanonas, presentes en pequeñas cantidades en alimentos como la piña, el tomate o las fresas. Otras sustancias a considerar en este sentido son los flavonoides, los taninos y las clorofilas, presentes en numerosas frutas, en hortalizas y en algunas bebidas alcohólicas como el vino tinto o la cerveza.