* Resumen-racapitulación de los principales aspectos relacionados con el hierro
- El hierro desempeña dos funciones primordiales en el organismo:
* Estructuralmente forma parte de la hemoglobina: proteína sanguínea encargada de captar el oxígeno en los pulmones, transportarlo por la sangre y liberarlo en los tejidos. Asimismo, forma parte de otras hemoproteínas como la mioglobina, encargada de almacenar cantidades discretas de oxígeno en el músculo y de la ferritina, que almacena hierro en el intestino y en el hígado.
* Como elemento regulador el hierro actúa de cofactor en las reacciones de obtención de energía (ATP).
- El hierro puede presentarse en dos formas básicas:
* Integrado en estructuras tipo hemo (hierro hemo), presentes en alimentos de origen animal como la morcilla, las carnes rojas, las vísceras y los pescados azules.
* En forma de sales ferrosas contenidas en alimentos vegetales como las lentejas, las espinacas y los frutos secos.
- En principio el hierro hemo presenta una mayor biodisponibilidad que el hierro no hemo. No obstante, existen diversos factores dietéticos que influyen de forma positiva y negativa en la asimilación del hierro, especialmente del tipo no hemo:
* La vitamina C y el ácido cítrico favorecen su absorción.
* El ácido fítico, los oxalatos, el calcio y el magnesio dificultan su absorción.
- La carencia de hierro produce anemia por falta de hemoglobina, lo que compromete el suministro de oxígeno a las células y, con ello, la producción de energía, por eso entre los síntomas de la anemia ferropénica destacan el cansancio y la debilidad.
- Pueden darse situaciones de riesgo de falta de hierro si aumentan las demandas, como ocurre en el caso de las embarazadas, de las lactantes, de los recién nacidos y durante la época de crecimiento. Asimismo, existe riesgo de déficit si se sufren hemorragias cuantiosas de diversa índole. En tales casos es frecuente recurrir a suplementos de hierro que complementan el aporte dietético.
- En condiciones normales el organismo regula la absorción del hierro en función de sus necesidades.
- Si se absorbe de forma descontrolada, como ocurre en personas con hemocromatosis, el hierro puede llegar a ser tóxico pues se acumula en vísceras como el hígado, los riñones y el corazón ocasionando daños irreparables.